História Enamorado de un demonio - Laught jack

Que necesitas? 

-dulces

-MP3 de pop goes to weasel.                        (versión  laughing Jack) 

-luces apagadas

Advertencia 

-No detengas la canción después del minuto 

-No tengas espejos cerca

-No cierres las ventanas 

Tirra los dulces en el suelo y siéntate alrededor de tu cama, reproduce la canción. 

Después de un minuto tendrás una sensación rara y comenzarás a reír como un psicópata. 

Cuando acabe la canción revisa que las ventanas estén abiertas. No tardarás mucho en escuchar una risa psicópata. 

Estará hay, si quieres puedes hablar con él, te responderá. Cuando quieras finalizar el ritual di adiós y prende las luces. 

Fui a la cocina y por suerte encontré unos dulces que mi madre había comprado. Busque la canción, fui a mi habitación y habría las ventanas y cerré la puerta par después apagar las luces, regué los dulces alrededor de la cama y me senté en medio de esta. 

La canción comenzó a sonar, la temperatura se estaba poniendo fría.   podía sentir escalofríos por toda mi espalda después del minuto empecé a reír sin parar, fui a revisar si las ventanas aún seguían abiertas, estas se habían cerrado un poco, después de ello pude escuchar una sonrisa como si de un psicópata se tratase, tengo que admitirlo tenía mucho miedo. 

*Adib*era una voz grave y burlona la cual resonaba por toda la habitación. 

—sab-es algo so-bre Be-lcebú- dijo tartamudeando, quería saber más cosas sobre aquel demonio el cuál estuvo conmigo todo este tiempo. 

*claro, sé que el es un príncipe del infierno y que por alguna razón este te ha estado protegiendo por mucho tiempo

—pero, porque- quizás el me podría responder a mi pregunta. 

~oh Adib, todavía no puedes saber eso, lo siento~ dijo aquella voz tan conocida para mí, era Belcebú el cuál ahora hablaba. 

—Belcebú, pero porque no lo puedo saber, eso es injusto-dije con mi voz temblando, una lagrima se deslizo por mi mejilla. 

~aún no es el momento, no intestes averiguar más, hay muchos que te quieren lástimar y no siempre podré protegerte, adiós~ sentí como una mano toco mi rostro y limpio mi lagrima. 

La luz se encendió y la puerta se abrió, vi por el cuarto y los dulces habían desaparecido, me sentía frustrado, no había podido saber nada más de mi demonio. 

No entendía nada, porque no podía saberlo, en que momento lo sabría y porque las cosas no simplemente podían seguir como antes, además que soy realmente, solo podía pensar en Belcebú, pero a que se debía que aquel demonio estuviera haciendo todo esto, solo lograba confundirme y hacer que me enojara con el y además por que razón un demonio tan importante me cuido toda mi vida hasta hoy, me estaba comenzando a doler la cabeza, mejor salí del cuarto y me prepare para dormir, entre a mi habitación. 

Estaba a punto de apagar la luz cuando la almohada cayó al suelo y la luz comenzó a parpadear, mis piernas temblaban y mi respiración se aceleraba pero todo volvió a como estaba antes era como solo hubiera sido una jugada de mi mente, apague la luz y me acosté en la cama para después de unos minutos quedarme dormido.