História Química Laylor - Laura Prepon Taylor Schilling (2016) - Juego.

Capítulo 06: “Juego”.

Miércoles, Laura y sus compañeros de la película en la que estaba trabajando habían quedado para cenar en un restaurante. A dicha cena Taylor también estaba invitada como acompañante de Laura.

La cena trascurrió bien, pero mejor trascurrieron las dos horas en Melkweg, un club nocturno donde acudieron para tomar unas copas después de cenar.

— ¿Te lo estás pasando bien? —Preguntó cuándo salió a la terraza del club y se sentó al lado de Taylor.

—Hola —Sonrió al encontrarse con la mirada de Laura—. —Sí bebé —Respondió siendo sincera.

La música no estaba muy fuerte y podían hablar sin levantar la voz. A su alrededor habían personas hablando entre sí pero ninguna pertenecía al elenco de la película.

—Me alegra oír eso. Pero podemos irnos cuando quieras.

—No te preocupes Laura. Realmente me lo estoy pando bien y tus compañeros son encantadores. Disfruta ¿sí?

—Quiero disfrutar, pero a solas contigo. ¿Entiendes a qué me refiero exactamente? —Dijo sonriendo divertidamente.

—Uhm… —Murmuró Taylor—. Creo que te entiendo, pero tengo algunas dudas —Bromeó— ¿Podrías guiarme un poco?

Laura depositó varios besos en el cuello de Taylor y poco a poco llegó hasta su boca para finalmente besarla.

— ¿Qué tal si pedimos un taxi y regresamos al hotel?

—Me parece una muy buena idea… —Respondió Laura quien agarró la mano de Taylor y luego se pusieron de pie.

∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤

Pocos minutos más tarde Laura y Taylor se despidieron del grupo de personas con el que habían ido al club y salieron a esperar al taxi que pidieron anteriormente.

— ¿Se puede saber que estás mirando? —Preguntó Laura pillando infraganti a su novia quien tenía clavada su mirada en el escote.

— ¿Disculpa? —Fue lo único que logró decir Taylor después de levantar la mirada hasta los ojos de la morena.

Laura rio.

—Tus ojos estaban devorando mi escote. ¿Qué pasa Tay, no puedes esperar a llegar al hotel? —Preguntó burlonamente.

Taylor se rindió, Laura la había descubierto.

—De acuerdo, estaba mirando tu escote. Pero es tu culpa por ponerte ese vestido tan provocador…

— ¿Provocador? Creo que estás un poco desesperada... —Dijo volviendo a burlarse de ella.

Taylor se percató que a unos dos metros de distancia había una especie de portal con la puerta tapiada que en algún momento, no muy reciente, fue utilizada como entrada principal del club. Agarró la mano de Laura y le guió hasta dicho portal. Cuando llegaron, Taylor depositó ambas manos en las caderas de Laura y se pegó de frente a ella acorralándola contra la pared.

Dirigió la boca hasta la oreja de Laura y pasó la punta de la lengua por su lóbulo izquierdo provocando que se estremeciera cuando sintió como los dientes mordieron y estiraron su lóbulo.

Un hormigueo se instaló en el cuello de Laura quien permanecía inmóvil e incapaz de hacer ni decir nada por varios segundos.

—Amor, no hagas esto —Pidió Laura hablando con dificultad—, o no podré esperar hasta estar en el maldito hotel —Dijo para besarla con desesperación.

— ¿Qué sucede Laura? —Se burló— ¿Quién está desesperada ahora? —Susurró maliciosamente en su oído y luego se separó lo justo para poder mirarla a los ojos.

— ¡Que te den Schilling! —Dijo sin ser desagradable para más tarde robarle otro beso.

A Taylor le gustaba jugar y consideró que ese era un buen momento para hacerlo…

Taylor finalizó el beso y Laura se quejó pero la rubia le ignoró y continuó con lo que tenía en mente. Llevó la boca hasta el cuello de Laura y depositó varias mordidas alternándolas con breves besos donde anteriormente le mordía. Siguió así hasta lentamente llegar a su oreja.

—La gente puede pasar frente a nosotras en cualquier momento —Susurró en el oído de Laura—. No sé cómo te las arreglaras pero voy introducir mi mano bajo tu vestido para ir directa hasta tu entrepierna —Movió la lengua en pequeños círculos contra el lóbulo de la oreja de Laura para luego mordérselo cuidadosamente.

Un escalofrió se apoderó de la columna vertebral de Prepon quien se excitó con las palabras y acciones de la rubia.  

—Tay… ¿Estás loca? —Consiguió decir torpemente imaginando los acontecimientos y darse cuenta de que Taylor no bromeaba.

—Shh… —Dijo para justo después deslizar la mano por la cintura de Laura rumbo al dobladillo del vestido que finalizaba más arriba de las rodillas de Laura.

Laura intentó procesar la información pero por un momento fue incapaz de actuar tras descubrir lo que Taylor tenía en mente.

—Espera, espera, espera —Puso las manos en el pecho de Taylor y cuidadosamente hizo que retrocediera tan solo un paso—. Me encanta esto, pero cualquiera que pase puede darse cuenta de lo que estamos haciendo.

Taylor se pegó de nuevo a Laura y esta vez quedaron más juntas que antes de que Laura la hiciera retroceder.

—Laura, eres actriz. Se te dará bien fingir y ocultar tus caras de placer… —Con la mano libre, Taylor alcanzó la barbilla de Laura e hizo que la boca quedase a la altura de la suya. Aplanó la lengua y la deslizó de abajo arriba por ambos labios de Laura para finalmente besarla mientras que su otra mano vagaba por los muslos de la morena.

— ¡Joder, Taylor! —Gimió perdiendo la noción del tiempo por escasos tres segundos.

La mano de Taylor entró en contacto con el interior de uno de los muslos de Laura quien ahora estaba más tensa que antes.

—No cierres los ojos o no podrás saber si la gente se acerca a nosotras… —Sugirió divertidamente deslizando poco a poco la mano dentro del vestido hasta llegar a la entrepierna de Laura.  

Ágilmente Taylor pudo acceder al interior del tenga de su novia llevando uno de sus dedos contra la entrada de Laura comprobando lo húmeda que ya estaba.

— ¡Mierda! —Exclamó Taylor excitándose al sentir entre sus dedos lo muy mojada que estaba Laura— Por tu bien espero que nadie se acerque a nosotras, de lo contrario cualquier persona será testigo de cómo vas a venirte…

— ¡Taylor! —Se mordió con fuerza su propio labio inferior disfrutando de las caricias de su novia— Esto es una locura, es mejor que te detengas —Sugirió sin estar segura de que quería que parase.

—Laura…realmente ninguna de las dos queremos parar, así que ponte cómoda porque no voy a detenerme…

Con la mano libre, Taylor separó un poco más las piernas de Laura para poder mover la mano con facilidad en el hueco de sus piernas.

— ¡Mmm, Taylor! —Gimió cuando sintió como dos dedos de Taylor se introducían en su sexo sin previo aviso.

—Relájate bebé…estamos pasando un rato agradable —Dijo divertida cuando sus dedos eran presionados por los músculos vaginales de Laura.

—No es hora de tus burlas —Le mordió el labio inferior mientras con una mano atrapó uno de los pechos de Taylor por encima de la ropa—. Cállate y termina con esto lo antes posible, no quiero que nos descubran.

— ¿Desde cuándo me exiges cosas? —Preguntó deteniendo el movimiento en el interior de Laura pero sin sacar los dedos.

— ¡No, Taylor! —Llevó la mano libre al cabello de Taylor y agarró un mechón para darle un leve tirón sin hacerle daño— Por favor bebé… —Suplicó.

Taylor gimió ante la acción y la petición de Laura. No necesitó tocarse a sí misma para saber que su entrepierna estaba tan o más húmeda que la de Prepon.

—Por favor, sin gemidos altos… No quiero que nos interrumpan… —Taylor volvió a retomar el movimiento bombeando dos dedos dentro y fuera de Laura mientras con el pulgar de la otra mano le frotaba el clítoris.  

Las manos de Laura se aferraron con fuerza a los hombros de Taylor mientras intentaba mantener la estabilidad de las piernas mientras la rubia masajeaba con agilidad su clítoris. Las miradas de Taylor y aquella sonrisa perversa conseguían multiplicar los sentidos de Prepon.

— ¡Ooh Tayylorrr! —Exclamó arrastrando las letras.

Schilling alternó el ritmo y los movimientos en el sexo de Prepon.

—Me encanta escucharte gritar —Informó Taylor maliciosamente—, pero recuerda controlarte —La besó para luego succionarle la lengua.

— ¡Joder! Creo que no aguantaré por mucho tiempo —Ahogó los gemidos en la boca de Taylor besándola desesperadamente.

—Hazlo —Susurró contra su boca—. Córrete Laura, córrete y gime para mí…

Las palabras causaron efecto en Laura quien no tardó mucho tiempo en venirse.

Cuando Taylor consideró que era el momento oportuno aceleró el ritmo y la dureza de los movimientos dentro de Laura introduciendo un tercer dedo sintiendo como los muslos vaginales se contraían por completo anunciando que estaba al borde del clímax.

— ¡Sigue! —Pidió Laura con un fino hilo de voz.

—Amor, quiero escuchar mi nombre o me detengo —Le retó Taylor susurrándole al oído con un malicioso tono de voz.

— ¡No te detengas! —Gritó sintiendo como estaba a punto de correrse— ¡Taylor por favor! ¡No pares bebé! —Echó la cabeza hacia atrás pegándola por completo a la pared mientras cerraba con fuerza los ojos y se mordía el labio inferior disfrutando del orgasmo que la rubia le proporcionaba.

Taylor no detuvo los movimientos dentro de Laura hasta que esta última llegó al orgasmo. La besó para silenciar sus gemidos y gritos.

—Me encanta cuando te muestras vulnerable —Confesó picoteando el cuello de Laura.

Ralentizó los movimientos de la mano para escasos segundos después sacar los dedos del interior de Laura. Le colocó el tanga e hizo lo mismo con el vestido.

—Espero que no hayas agotado toda tu energía —Dijo con la voz todavía entrecortada—, todavía tenemos más cosas que hacer cuando lleguemos al hotel… —Agarró delicadamente la cabeza de Taylor con ambas manos para poder tener acceso a su boca y besarla.

—Uhmm, me gusta cómo suena eso Laura, pero… ¿Crees que podemos matar el tiempo cuando estemos en el taxi? —Preguntó maliciosamente mordiéndose el labio inferior.

—Estoy segura de ello, así que consigamos un taxi lo antes posible…

∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤∞♤

N/A: ¡Gracias por leer!